Cuando se realizan mudanzas es imprescindible proteger todos los objetos de posibles roces o desperfectos. Los objetos más delicados y valiosos como es el caso de las obras de arte requieren de un cuidado especial cuando se trasladan de un sitio a otro. Una opción cuando realizamos una mudanza es hacer uso de un trastero donde depositarlas y posteriormente llevar esas obras de arte en un traslado dedicado especialmente a ellas. Pero en ese caso es necesario asegurarse de que la temperatura y humedad en ese trastero que servirá de transición es la adecuada y el almacenamiento de esas obras en dicho trastero no provocará daños en las mismas.
El embalado de las obras delicadas requiere de materiales especiales. El plástico de burbujas está especialmente indicado para evitar que los lienzos o esculturas sufran daños físicos. Las cajas de cartón pueden resultar útiles para este fin, pero es necesario emplearlas en combinación con el plástico de burbujas. Un embalaje muy recomendado es la jaula de madera en la que se fija la pieza y se recubre con láminas de goma espuma para conseguir una mayor protección. Sin lugar a dudas la forma más segura de transportar obras de arte que es la empleada en museos y exposiciones consiste en emplear cajas de madera. Dotando a estas cajas de alguna manilla para poder agarrarlas, resultan unos elementos cómodos de transportar y que proporcionan una gran seguridad.
El embalaje de las obras de arte es un paso de una mudanza que debe realizarse con sumo cuidado para asegurar la integridad de las mismas. Unas piezas únicas e inigualables requieren de la mejor protección posible, cuando se trasladan de un sitio a otro para poder disfrutar de las mismas en cualquier lugar.
¡Y lo mejor, es que lo deje en manos de profesionales!